Siendo la empatía la capacidad de percibir, compartir y comprender lo que otro ser puede sentir, es muy importante que esta aptitud socioemocional se desarrolle para alcanzar metas académicas y posteriormente profesionales.
En el ámbito escolar, en cualquier nivel, es importante que se construya una relación estrecha entre la alumna y la maestra y así poner objetivos. Para ello, la base es la empatía.
Entre más empatía exista entre las maestras y alumnas ellas tendrán mayor apertura al aprendizaje.
En primera instancia es responsabilidad de las profesoras fomentar esta empatía para que las alumnas estén motivadas y así desarrollen sus capacidades. Se trata de algo que tenemos muy presente en el Instituto Lomas del Real, y la manera en cómo las profesoras logran esta relación de confianza es a través de tres acciones.
1. La profesora como un ejemplo a seguir dentro del aula.
En este punto es muy importante la forma en que se dirige la maestra hacia las alumnas, ya que ellas están observando todo el tiempo, además de aprender de la materia que se imparte, aprenden mucho más del comportamiento y actitudes dentro y fuera del salón de clase. Si la maestra disfruta dar su clase las alumnas lo notan y ellas también lo harán.
2. Trabajo colaborativo.
El trabajo colaborativo es muy importante ya que las alumnas aprenden de alguien igual a ellas, y descubren que el conocimiento se alimenta y construye a través de la participación colaborativa, al tiempo que aprenden a respetar a sus compañeras y sus opiniones.
3. Comunicación.
Si las alumnas se sienten en confianza y sienten esa empatía con su maestra, será muy fácil lograr que ellas comuniquen sus aprendizajes y sus sentimientos.
Un ambiente positivo y de empatía mejora la motivación y las habilidades académicas de las alumnas, tales como la lectura, la escritura y las habilidades aritméticas.
Para construir la empatía entre maestra y alumna es básico tener una comunicación respetuosa. Es decir, si una maestra utiliza comentarios desagradables o destructivos, solo obtendrá respuestas negativas por parte de sus estudiantes; si la profesora sabe escuchar, las alumnas responderán de forma positiva.
Por el contrario, aquellas profesoras que son atentas, amables y respetuosas con sus alumnas consiguen mejores resultados de ellas, algo que hemos comprobado a través de lo años en el Instituto Lomas del Real.